Corría julio del 2009, como de costumbre Tempo peleaba el torneo Apertura mano a mano con Islas Malvinas. Faltaban solo tres fechas y el Tricolor debía chocar con el mismo rival de siempre, con ese que la sana rivalidad se potencia. Los Chiroleros estaban cerca en la tabla de posiciones, pero con pocas chances de llegar a ser campeones. Fueron los Negros quienes se adueñaron del partido y en un 3 a 2 ajustado terminaron ganando lo que sería su última adquisición de un Superclásico.
Desde entonces hasta la actualidad hubo tres partidos más. Copa de Invierno, Apertura y Clausura. Suficientes para que con gran esfuerzo el conjunto Tricolor diera vuelta el historial y sacara chapa en las dificiles. Sin pecar de soberbios, pero con la realidad con principal aval, el conjunto Tricolor logró vencer a su rival de siempre después d eempezar perdiendo 0-1.
Con el golazo de "Lucho" Cohelo de tiro libre Tempo empezaba una tarde negra. Con poco fútbol, mucha fricción y en un partido cortado, el ingreso de "dieguito" Arzúa -ex Tempo, Hispano y De La Mumurra- comenzó a manejar la pelota con criterio provocando y exigiendo a todo el fondo Chirolero. El afilado y goleador el "gordo" Lucarelli iba a marcar la igualdad luego de que el 1 le tapara varias dificiles.
El partido era parejo, algunas distracciones en el fondo sumado a la calidad de los hombres de Negro hacian lucir al "paragua" Gonzalez que respondía y le daba tranquilidad a sus compañeros desde el fondo.
Las internas Chiroleras le daban la posibilidad a Tempo de tranquilizarse y dejar entrever que con concentracion e impetú el partido tenía que quedar en favor del conjunto Tricolor.
Un cabezazo de "gerard" De La Cruz, jugándose con todo por la pelota iba a reboar en el palo y quedarle servida al oportuno goleador del Certamen, Federico Lucarelli. Festejo desmedido de toda la gente Temporaria para celebrar el objetivo cumplido por el número 11.
El partido seguía cortado, faltas intrascendentes dejaban asomar innecesarias tarjetas amarillas para ambos equipos. Quien pagó caro en la repartija fue Chiroli que se quedó sin su capitán "marton" Rico.
En la siguiente jugada fue la avivada de "edilson" Del Torto quien tras una notoria exageración, inventaba un penal a favor del equipo Negro. Otra vez fue su arquero, "lucho" Cohelo quien cambiara remate por gol para poner pardas al Superclásico.
Faltaban alrededor de 8 minutos y Tempo tenía un jugador de más el cual debía aprovechar. Iba para adelante con pocas ideas, pero la inspiración futbolística de "dieguito" Arzúa le sirvió una cucharita a "gerard" De La Cruz para que anotara el 3 a 2 y pusiera cifras definitivas a un emotivo partido.
Las últimas jugadas fueron para Chiroli que desesperadamente fue por el empate. Después de los tres minutos adicionales y con el pitazo final Tempo festejó varias cosas a la vez. La confirmación del Campeonato ya obtenido la fecha anterior, el invicto, la vuelta en el historial con el clásico, la obtención del trofeo goleador para el gran "gordo" Lucarelli y la valla menos vencida para el querido "paragua" Gonzalez.
Mostrando un ejemplo, ambos equipos se reunieron y entre felicitaciones por el buen partido partieron juntos a comer un asado pactando una filosofía que se fortaleze en base a grandes personas.
Tempo ganó en la cancha, consiguió su cuarta estrella que lo mantiene en la elite de la historia chica de Vixen.
Con merecidas vacaciones el conjunto Tricolor cerrará el año con un asado intimo de grupo para brindar por el grupo que sigue haciendo feliz a los integrantes del plantel y a su gente.
Felicidades para Tempo, para todos los equipos que vibran por el fútbol y que luchan día a día para formar un torneo que sigue creciendo también desde lo humano.
AC Tempo, más que un equipo...