Tempo jugó un amistoso con Los Papa y lo venció por 9 a 4 con un equipo remendado a último momento. Entre las suspenciones y los ausentes solo jugaron 4 integrantes del plantel que afrontará el Apertura. Por momentos hubo despliegue y buen fútbol de los Tricolores.
Tras una inesperada y dolorosa caída en la primera Fase de la copa, que dejo como saldo a varios jugadores suspendidos, el tricolor organizo un amistoso con el objetivo de reconstruir ese gran equipo que se coronó en el clausura 2010. Con una lluvia que motiva a cualquier amante del fútbol, el equipo incompleto arribo al predio de Del Viso, el fastidio por parte de los presentes no se hizo esperar al notar algunos indicios de falta de compromiso.
El partido comenzaba con un A.C. Tempo completado por dos alcanza pelotas, un chistoso Federico Lucarelli disfrazado de arquero y un Grillo Centamori arengando desde afuera con botella en mano. Con un dibujo táctico 3-2-1 los de Lucarelli (flamante técnico interino) descoordinaban los relevos, cosa que fue muy bien aprovechada por los muchachos de Papa que no tardaron en marcar el primer gol a los 10´ de comenzado el encuentro. Para ese entonces ya habían ingresado a la cancha los debutantes Elías y Fernando Rovito, que respondieron inmediatamente al llamado de Guaby (capitán y flamante coordinador) y se hicieron presentes para dar una mano. El primer tiempo finalizaba con un A.C. Tempo que seguía descoordinado tácticamente, pero con algunos vestigios de juego asociado entre Pepino, Fernando y Guaby, lo que alcanzo para dar vuelta el marcador 4 a 2 a favor de los Leones.
Durante el entre tiempo el D.T. pegó un volantazo, y el tricolor salio al complemento con un acertado sistema 2-3-1. Los relevos parecían aceitarse con el correr de los minutos, los zagueros ( Lucas y el General) trepaban por los laterales generando sorpresa, Pepino y Guaby sacaban a relucir el tiki-tiki, y habilitaban con pinceladas de buen fútbol a Fernando y a un movedizo Elías.
No todo era color de rosas, las llegadas de Los Papas complicaban a los defensores y hacían tambalear al arco de Lucarelli, que se lucia con buenas atajadas (dedicadas a su eterno cómplice el Grillo), y con algunas pifiadas también. El partido finalizaba con un abultado triunfo 9 a 4, que parece decir A.C. Tempo levantate y anda…
