Con buen marco desde afuera AC Tempo venció 2 a 1 a Gladiadores y no le pierde pisada a Bordolino, que mantiene la punta y sigue firme en lo más alto.
Comprometidos con una sola causa, no perderle pisada a Bordolino, el equipo del "Grillo" Centamori remontó esos partidos que solo se ganan con inteligencia y huevos. No necesariamente porque sean sus principales virtudes, pero sí salen a relucir ante la ocasión que lo amerite. No es la primera vez que los tricolores ganan jugando de contra. La primera parte fue muy pareja, tanto Tempo como Gladiadores, dos ambiciosos protagonistas del Clausura, buscaban llevar las riendas del partido; con desajustes defensivos pero con un seguro arquero, el equipo Temporario intentó atacar por todas las vías posibles. Buenas combinaciones hicieron esforzar al buen arquero Gladiador que tuvo que revolcarse en más de una oportunidad; el "gordo" Lucarelli era lo más peligroso en ataque, el resto del equipo lo asistía.
En su mejor momento, cuando mas atacaba y controlaba la pelota Tempo, una "avivada" del delantero de los de Negro, sobrepaso la confianza del "general Battistón y ante el achique de Ezequiel Gonzalez remató fuerte arriba para poner las cosas 0-1.
Tranquilidad en los dirigidos por Centamori, ya que su buen juego no permitiría desmoralizar a este equipo bien armado, y con confianza en dar vuelta, una vez más, un resultado adverso.
Sin perder la calma fue en busca del empate y lo consiguió a través de la magia, a la que ya nos tiene acostumbrado, el "gordo" Lucarelli. Sombrerito de empalada al arquero y el justo 1 a 1.
El descanso necesario fue pura y exclusivamente recuperador. Un partido a mucho ritmo, con constantes situaciones cambiantes podían modificar el resultado y el ánimo de cualquiera de los equipos.
Con una apuesta mas ofensiva tempo intentaría aumentar el marcador. "Gony" Lafroscia y "tato" Andreoli en cancha el equipo ganaría posesión, y resignaría marca.
Lo imaginado por el DT Tricolor no era lo que iba a pasar realmente. Bordolino hacía una fuerte apuesta a la ofensiva con gran desgaste físico y mucho ritmo. por eso el match era atrapante, de ida y vuelta con situaciones de peligro para ambos equipos. Eso sí, se jugaba en campo Tricolor, que asumía ser superado en la tenencia de pelota, pero jamás resignaría el partido.
"Tato" Andreoli deslucido y fastidioso por resignar juego a cambio de marca ultradefensiva para él, siempre se las rebusca para generar una situación, que sabe aprovechar y es de gran funcionalidad para el equipo.
"guaby" Villa toca recto para "tata" Rovito que descarga a un costado, "tato" Andreoli supera su marca y define de globo ante la salida del arquero. Un defensor llega a tocarla, pero el goleador Rovito pone suspenso, deja que el defensor quede en desequilibrio y manda la pelota al fondo de la red. Jugada de pizarrón, gritado y festejado demostrando todo lo que costó ese gol; Tempo se ponía en ventaja a falta de 10 minutos.
La última parte del encuentro fue a puro aguante. Huevos, coraje, entrega y corazón por parte de los 7 en cancha, los tres de afuera y los amigos y familiares presentes. Además, Ezequiel Gonzalez, flamante reemplazo del "paragua" Gonzalez, se lució desviando con la punta del guante una pelota con destino de red.
Sufriendo pero ganando Tempo venció a uno de los flamantes competidores por el título. No le pierde pisada a Bordolino y se motiva para seguir firme en la lucha a la que esta acostumbrado. No es la primera vez que Tempo corre desde atrás y si bien quedan muchos encuentros y clásicos muy dificiles la mentalidad ganadora del equipo de Centamori asegura estar a la altura de las circunstancias.
