Los antiguos griegos, padres de la filosofía y el pensamiento moderno, veían el deporte como deshogo de pasiones, desarrollando distintas disciplinas y justas deportivas, atletas que las practicaban y pueblos que disfrutaban observándolos, unidos todos por la misma pasion. Por suerte, lo bueno perdura, aunque cambie de forma, es hoy el football entre todos los deportes el mas popular, despierta algo inexplicable cuando se esta ligado sin interés, como en el caso de los clubes de barrio, las divisiones infantiles de los clubes chicos, o como el que nos trae, el football amateur. Cuando lo único que esta en juego es el sano espíritu deportivo, la competencia leal, el deseo de ganar limpiamente como único objetivo, superando al adversario en el campo de juego. Da un sentido de pertenencia, ser de un equipo, defenderlo y llevarlo en el corazón, tantas cosas que un jugador o un incha ni las piensa, solo le pasan. El partido tambien se vive de afuera con las hinchadas que disfrutan y aportan su color y alegría como prueba de lo generoso que es el deporte, distribuyendo emociones tanto fuera como dentro del campo. Así nos pasará este sábado a los que tengamos la suerte de disfrutar un nuevo encuentro entre dos equipos que lo sienten de esta manera, Asesinos Cereales, aguerrido y experimentado equipo que deja todo en la cancha, y el último Bicampeon a quien todos consideran el equipo a vencer. Aprovechemos la oportunidad y a darle rienda suelta a la alegría y a la emoción, que por esas cosas lindas que esto tiene, se disfruta desde mucho antes de empezar, y se sigue disfrutando mucho después de terminar.
Por Sergio Rovito.